La neumonía está definida por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como una infección respiratoria aguda que afecta a los pulmones.
La manifestación patológica se debe a que los alvéolos, los sacos donde se da el intercambio respiratorio, se llenan de pus debido a la actuación del sistema inmunológico, lo cual deriva en una respiración dolorosa y absorción limitada de oxígeno.
Existen diversos microorganismos que actúan como agentes causales de la enfermedad, que pueden ser virus, bacterias u hongos, y entre los más comunes se pueden destacar Streptococcus pneumoniae, Haemofilus influenzae o incluso Klebsiella pneumoniae en el caso de bacterias y el paramixovirus llamado virus respiratorio sincitial (VRS) como principal responsable de la neumonía vírica.
Pero, actualmente se han disparado las alarmas por la existencia de un nuevo brote de coronavirus primeramente detectado en Wuhan, una de las ciudades más pobladas de China.
La neumonía provocada por este virus ha desembocado en el fallecimiento de 169 personas y con aproximadamente 7.000 casos de personas infectadas, según datos recopilados hasta el día 29 de enero de 2020 (78.000 casos y 2.442 muertes al 23 de febrero de 2020).
Llegados a este punto viene bien conocer un poco a la familia Coronaviridae para saber de qué trata este nuevo individuo de tan «aristocrática» familia.